Washington, D.C., — El expresidente Donald Trump ha desatado una nueva controversia al sugerir la posibilidad de retirar la ciudadanía estadounidense a la actriz y presentadora Rosie O’Donnell. Esta declaración fue realizada a través de su plataforma de redes sociales, Truth Social, generando un intenso debate sobre los límites del poder presidencial y los derechos civiles de los ciudadanos.
El exmandatario afirmó estar evaluando seriamente esta medida, alegando que O’Donnell, quien actualmente reside en Irlanda, no contribuye positivamente al país. Esta situación añade un nuevo capítulo a la ya tensa relación entre Trump y O’Donnell, quien ha sido una crítica vocal de su administración y políticas durante años.
La animosidad entre ambos se remonta a numerosos enfrentamientos públicos y declaraciones cruzadas, que han mantenido a estos dos personajes en el centro de la atención mediática. La reciente amenaza de Trump no solo reaviva el conflicto, sino que también plantea preguntas sobre la viabilidad y legalidad de revocar la ciudadanía de un individuo por motivos personales o políticos.
El impacto de esta declaración ha repercutido en diversos sectores, generando opiniones divididas y reacciones tanto de apoyo como de rechazo. Mientras algunos respaldan la postura del expresidente, otros defienden el derecho de O’Donnell a expresar libremente sus opiniones.
La situación continúa desarrollándose, y se espera que tanto Trump como O’Donnell tomen nuevas acciones en los próximos días, lo que podría intensificar aún más este ya polémico enfrentamiento.