Santo Domingo, En un esfuerzo por abordar la creciente crisis en Haití, la Organización de los Estados Americanos (OEA) ha presentado una nueva estrategia dirigida a restaurar la seguridad y promover la estabilidad política en el país, afectado gravemente por la violencia de grupos pandilleros. Este plan busca también mitigar la crítica situación humanitaria que enfrenta la nación caribeña.
El secretario general de la OEA, Albert Ramdin, ha hecho un llamado a los países y actores internacionales para incrementar la coordinación y financiación en apoyo a Haití. Enfatizó la importancia de dejar de lado las divisiones políticas y personales para priorizar el bienestar de los haitianos. Según Ramdin, reconstruir la confianza entre la comunidad internacional y los haitianos, tanto dentro del país como en la diáspora, es crucial para el éxito del plan.
La OEA propone un enfoque práctico en el que cada nación se comprometa a contribuir en diferentes aspectos de la reforma, con el objetivo de mejorar la calidad de vida, reactivar la economía y reducir la inseguridad. Ramdin subrayó que tanto la coordinación como los recursos financieros son fundamentales, alertando que sin los fondos necesarios, cualquier plan carece de sustancia. Además, destacó que el apoyo no se limita al ámbito económico, sino que incluye también experiencias, capacitación y fortalecimiento institucional.
Aunque países como Canadá y Estados Unidos ya han mostrado su apoyo, Ramdin resaltó un renovado interés por parte de América Latina para asistir a Haití, y llamó a capitalizar esta oportunidad mediante una gestión transparente de los recursos.
En cuanto a la seguridad, el secretario general aclaró que la OEA no tiene el mandato para operaciones de mantenimiento de la paz, una responsabilidad que recae en Naciones Unidas o en otros países. Actualmente, Kenia lidera esta misión, pero se requiere la contribución de más efectivos, y varios países sudamericanos han expresado su disposición a colaborar. La OEA, por su parte, puede ofrecer apoyo en la movilización política y logística para esta fuerza de paz.
El plan de la OEA también busca avanzar en áreas como la reforma constitucional, la creación de un consejo electoral permanente y el desarrollo de políticas en salud, educación y generación de ingresos. Ramdin destacó la necesidad de que al menos dos o tres gobiernos completen sus mandatos para consolidar la estabilidad y fortalecer las instituciones del país.
Con respecto a las próximas elecciones, programadas antes de febrero de 2026 tras el Consejo Presidencial de Transición (CPT), Ramdin expresó su escepticismo, advirtiendo que deben cumplirse varios requisitos para que se realicen bajo estándares internacionales adecuados. Alertó que un fracaso en lograr avances antes de fin de año podría permitir que las pandillas tomen ventaja del vacío político.
Finalmente, Ramdin hizo un llamado a la unidad internacional, instando a dejar de lado las intrigas políticas y los egos personales para avanzar más rápidamente y con mejores resultados en la situación de Haití.