Nacional – La realidad de una frontera “Blindada y Segura” ha sido cuestionada tras revelarse el abandono de puestos neurálgicos del Ejército de la República Dominicana (ERD) en la parte norte del país, contradiciendo los anuncios de reforzamiento continuo con efectivos militares y equipos.
El periodista Javier Luciano pudo constatar y documentar en un recorrido extenso, con grabaciones audiovisuales, la falta de presencia militar en estas áreas. Esta situación pone en duda las afirmaciones oficiales sobre la seguridad fronteriza.
Uno de los tramos más críticos de la frontera, situado en la provincia Dajabón, está desprovisto de personal militar, contrario a lo publicado en diversos medios de comunicación. Un claro ejemplo es el puesto militar en la comunidad Alto de La Paloma, perteneciente al distrito municipal Capotillo, del municipio Loma de Cabrera, el cual lleva aproximadamente 15 años en total abandono. Este puesto es esencial para la vigilancia y seguridad en esta franja fronteriza.
Además, las imágenes captadas por Luciano muestran una grave deforestación causada por individuos de nacionalidad haitiana, quienes talan árboles y queman grandes áreas boscosas sin ningún control.
Estas revelaciones exigen una respuesta urgente y efectiva por parte de las autoridades para garantizar la seguridad y protección de la frontera y sus recursos naturales.