Santo Domingo, República Dominicana – En la República Dominicana, varias empresas, especialmente las pequeñas, imponen políticas restrictivas sobre los medios de pago que aceptan, dependiendo de la rentabilidad percibida de cada transacción. El abogado Enmanuel Moreta Fermín señala que el dinero en efectivo, al ser el medio de pago más líquido y fundamental para los consumidores, debe ser aceptado sin restricciones. Moreta Fermín argumenta que limitar este medio de pago vulnera el derecho del cliente.
A pesar de esto, en el Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA), algunas aerolíneas han restringido el uso de efectivo, permitiendo únicamente el pago con tarjeta de crédito.
El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) define los instrumentos de pago como métodos físicos o electrónicos que permiten transferir fondos, incluyendo cheques, transferencias electrónicas y pagos con tarjeta a través de cajeros automáticos, terminales de puntos de venta y dispositivos móviles.
Representantes del sector comercial reconocen que hay negocios que no aceptan pagos con tarjetas debido a los costos asociados. Algunos incluso aplican cargos adicionales por su uso, una práctica que, según Moreta Fermín, es ilegal bajo la Ley 358-05, la cual prohíbe cobrar cargos extras diferentes al valor del producto.
«El usuario va a satisfacer una necesidad, pero el proveedor tiene un proceso de generación de valor y riqueza. Desde el punto de vista de la justicia y del derecho al consumidor, no se les puede imponer cargos adicionales», asegura Moreta Fermín.
Iván García, representante de la Federación Dominicana de Comerciantes (FDIC), argumenta que los altos porcentajes de comisión por el uso de tarjetas pueden afectar significativamente a los pequeños negocios. Sugiere que estas comisiones deberían estar reguladas entre el 0.5 y el 2 %.
Luis Mira, presidente de la Confederación Dominicana de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Codopyme), defiende la facultad de los comerciantes para fijar tasas por el uso de ciertos métodos de pago, basándose en el margen de ganancia y los costos de transacción que deben cubrir.
El Banco Central informó recientemente un aumento significativo en el uso de tarjetas de débito y crédito en el país. A junio de 2024, alcanzaron los 7,210,119 y 3,849,081 plásticos, respectivamente, con aumentos del 41.4 % y 47.3 % en comparación con junio de 2019.
En respuesta a prácticas que podrían vulnerar los derechos del consumidor, el director ejecutivo de Pro Consumidor, Eddy Alcántara, exhorta a los consumidores a no aceptar cargos adicionales por el uso de tarjetas, recordando que cada comercio tiene la libertad de decidir sus políticas de pago, pero dentro de los límites legales establecidos.
«Hacemos un llamado a los consumidores para que no acepten que, porque estén pagando con tarjeta, les cobren un adicional», apunta Alcántara.