En un video difundido ampliamente en redes sociales, se observa a un agente de la Policía Nacional arrebatando el teléfono celular a un ciudadano que documentaba una intervención policial desde el interior de su vehículo. Este incidente ha generado indignación pública y cuestionamientos sobre el proceder de las autoridades en este tipo de situaciones.
De acuerdo con el marco legal vigente en el país, los ciudadanos tienen derecho a grabar en espacios públicos o desde su propiedad privada, como es el caso de su vehículo, siempre que no interfieran directamente con el desempeño de las funciones policiales. El acto del agente, captado en video, podría constituir una violación de los derechos del ciudadano, según expertos en derecho constitucional.
Se espera que las autoridades pertinentes investiguen el incidente y determinen si el comportamiento del agente infringió los protocolos establecidos por la institución policial, así como los derechos del ciudadano afectado.
La Policía Nacional no ha emitido una declaración oficial al respecto hasta el momento. Se insta a las autoridades a garantizar que este tipo de incidentes no se repitan y a reforzar la capacitación de los agentes en materia de derechos humanos y comportamiento profesional.