Estados Unidos vivió este sábado una escena que recordó a los grandes magnicidios políticos de la historia del país. El expresidente Donald Trump resultó herido leve en un mitin político después de que un atacante disparara varias veces.
El FBI comunicó que investiga el hecho como un intento de asesinato y designó el lugar como escena del crimen.
Las autoridades identificaron al atacante como Thomas Matthew Crooks, un joven de 20 años residente en Bethel Park, en el área metropolitana de Pittsburgh (Pensilvania). Crooks murió abatido por las fuerzas de seguridad tras llevar a cabo el tiroteo.
Las investigaciones continúan mientras el país se recupera del impacto de este evento. La seguridad en los eventos políticos ha sido reforzada, y se espera que se tomen medidas adicionales para proteger a los líderes y figuras públicas en el futuro.