Santo Domingo, RD – Aunque la Junta Central Electoral (JCE) ha aclarado que faltan más de dos años para que se abra oficialmente la precampaña rumbo a las elecciones de 2028, es evidente que los partidos políticos comienzan a mostrar señales de actividad si buscan tener alguna opción en el proceso electoral. En este sentido, el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ha quedado marcado por su discreta presencia en la escena política.
Abel Martínez, líder del PLD, es el único que, en contadas ocasiones, ha logrado sacar la cara por la organización, mientras que Francisco Javier García ha hecho algunas apariciones bimensuales, pero sin un enfoque claro que sugiera una preparación robusta para los comicios venideros. Sin embargo, la mayoría de los demás miembros del partido permanecen callados, sin emitir opiniones ni críticas sobre el gobierno actual.
Este silencio ha suscitado interrogantes sobre el futuro del PLD como oposición. En momentos clave para el país, su falta de intervención y propuestas visibiliza una desconexión con las demandas de la población. La ausencia de críticas al gobierno de turno, incluso ante decisiones que afectan directamente a la ciudadanía, ha llevado a muchos a preguntarse si el partido está realmente preparado para retomar su rol protagónico en la política nacional.
Con el tiempo en contra, será esencial que el PLD reflexione sobre sus próximos pasos, activándose no solo en los discursos, sino también en acciones concretas que permitan posicionarse como una opción real en las elecciones de 2028. Solo así podrá tener una oportunidad de recuperar la confianza y el respaldo popular.