Ginebra. La Organización de las Naciones Unidas llamó a la comunidad internacional a actuar de manera inmediata frente al grave conflicto que afecta a Sudán desde hace más de dos años y medio, alertando que la situación se ha convertido en una guerra oculta por el control de recursos.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió sobre ejecuciones masivas, violencia sexual, secuestros, detenciones arbitrarias y ataques al personal sanitario tras la reciente toma de la ciudad de Al Fasher, en la región de Darfur.
La ONU urgió a que el caso sea remitido a la Corte Penal Internacional y pidió un embargo total de armas en todo el territorio sudanés para frenar el flujo de armamento hacia los grupos enfrentados.
El conflicto, iniciado el 15 de abril de 2023, ha provocado decenas de miles de muertes y más de 13 millones de desplazados, dejando a gran parte de la población en una situación de inseguridad alimentaria extrema. El organismo también advirtió del riesgo de una nueva escalada hacia la región de Kordofán, donde ya se reportan desplazamientos y bombardeos.
