Roma, Italia. Un ciudadano chino de 33 años ha sido detenido en Milán, en el norte de Italia, tras una orden de detención internacional emitida por las autoridades de Estados Unidos. Se le acusa de formar parte de un grupo que presuntamente espió las vacunas contra el COVID-19 desarrolladas en EE.UU. durante el año 2020, en plena pandemia.
El arresto tuvo lugar el pasado 3 de julio en el aeropuerto de Malpensa, el más importante de la región milanesa. Posteriormente, el sospechoso fue trasladado a la prisión de Busto Arsizio, ubicada en la provincia de Varese, por orden judicial.
Se espera que el detenido comparezca ante el Tribunal de Apelación de Milán para abordar el proceso de extradición solicitado por Estados Unidos. Según una investigación del FBI, el individuo habría formado parte de un grupo que espió las investigaciones sobre las vacunas en la Universidad de Texas. Estas investigaciones, lideradas por universidades, inmunólogos y virólogos estadounidenses, eran altamente confidenciales y sensibles en ese momento.
Además, el informe del FBI sugiere que las actividades de espionaje se realizaron en colaboración con autoridades del Gobierno chino. El acusado enfrenta cargos de espionaje informático, asociación criminal para cometer fraude informático y robo de identidad, entre otros delitos. Sin embargo, su familia afirma que él es simplemente un técnico informático que se encontraba de vacaciones en Italia.
La orden de arresto fue emitida el 2 de noviembre de 2023 por el Distrito Sur de Texas del Tribunal Federal de EE.UU. El caso ha generado gran interés debido a las implicaciones internacionales y a la creciente preocupación por la seguridad cibernética en el ámbito de la salud pública.