Santo Domingo. Miles de líneas prepago activas en República Dominicana están en manos de ciudadanos extranjeros, principalmente haitianos, muchos de los cuales no poseen documentos válidos. Esta situación coloca a las telefónicas Altice y Claro ante posibles pérdidas millonarias, luego de que el Indotel ordenara depurar todas las líneas que no estén registradas con identidad verificada.
Mediante la Resolución 064-2025, el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones dio un plazo de 30 días para que las empresas telefónicas cancelen las SIM cards anónimas. A partir de ahora, toda venta de líneas deberá exigir cédula, pasaporte o carné de residencia, además de una foto del comprador.
La medida busca frenar delitos como el robo de celulares, narcotráfico y sicariato, donde se usan líneas no rastreables. Sin embargo, impactará de forma directa las ventas informales, que representan hasta un 85 % del mercado prepago. Muchas de esas líneas generan ingresos constantes para las compañías, y su eliminación podría traducirse en millones de pesos en pérdidas.
El presidente de Indotel, Guido Gómez Mazara, advirtió que las prestadoras que no cumplan serán sancionadas y se tomarán acciones con el Ministerio Público.