Puerto Príncipe, 23 de mayo de 2025 — El Gobierno haitiano recibió oficialmente este jueves el anteproyecto de una nueva Constitución, que propone reformas profundas al sistema político del país, en un intento por allanar el camino hacia una transición democrática estable y duradera.
El documento, elaborado por un comité directivo y entregado al Consejo Presidencial de Transición (CPT) en una ceremonia en la Villa d’Accueil, introduce medidas innovadoras como la reducción de la edad mínima para ocupar cargos públicos, la elección directa de gobernadores departamentales y una nueva distribución de poderes entre el Ejecutivo y el Legislativo.
Entre los principales cambios, se establece que el presidente de la República será tanto jefe de Estado como de Gobierno, y podrá nombrar a un primer ministro encargado de coordinar la acción gubernamental. Asimismo, se unifica en cinco años el periodo de todos los cargos electivos, se limita a quince el número de ministros y se redefine la representación senatorial, con dos senadores por departamento y dos más por la diáspora.
En el plano administrativo, cada uno de los departamentos del país contará con un gobernador elegido por voto popular. Estos gobernadores integrarán un Consejo Interdepartamental encargado de planificar junto al Ejecutivo los proyectos de descentralización y desarrollo.
El texto también contempla la posibilidad de que extranjeros residentes o empresas foráneas puedan acceder a la propiedad inmobiliaria para fines económicos y sociales, aunque se mantiene la prohibición de propiedad en zonas fronterizas y se sanciona la injerencia extranjera en asuntos políticos internos.
Durante la ceremonia, el primer ministro Alix Didier Fils-Aimé y el ex primer ministro Enex Jean-Charles destacaron el simbolismo del acto, al que calificaron como “un paso decisivo en la transición” hacia una República más legítima, estable y representativa.
El anteproyecto será sometido ahora a un proceso de diálogo nacional amplio e inclusivo, con el objetivo de celebrar un referéndum ciudadano para su aprobación definitiva.
Este esfuerzo constitucional llega en un momento crítico para Haití, marcado por una aguda crisis de seguridad, una economía deteriorada y el desplazamiento de miles de ciudadanos debido a la violencia de bandas armadas.
El Gobierno reitera su compromiso de avanzar hacia una institucionalidad sólida y un marco democrático que garantice los derechos y la participación de todos los haitianos.