Aguachica, Cesar – 29 de diciembre de 2024.
Una tragedia sacudió al municipio de Aguachica este domingo, cuando una familia de cuatro personas, compuesta por dos pastores evangélicos y sus hijos, fue asesinada en un ataque armado dentro de un restaurante ubicado en el centro de la localidad.
El ataque ocurrió alrededor del mediodía en la calle quinta con carrera 30, cuando un hombre armado ingresó al establecimiento y disparó repetidamente contra la familia, quien se encontraba compartiendo un almuerzo. Según testimonios de los presentes, el perpetrador llegó al lugar en una motocicleta, lo que ha generado conmoción y pánico entre los habitantes del sector.
Las víctimas fueron identificadas como Marlon Lora y su esposa Yurlay Rincón, ambos líderes religiosos, junto a sus hijos Ángela Natalia Lora Rincón, quien trabajaba como periodista, y Santiago Lora Rincón. Tres de los integrantes fallecieron en el lugar, mientras que el cuarto murió posteriormente en un centro asistencial.
Reacción de las Autoridades y la Gobernación del Cesar
La Policía del departamento del Cesar ha iniciado las investigaciones para dar con el paradero de los responsables y ya cuentan con retratos hablados. Asimismo, la Gobernación del Cesar emitió un comunicado expresando su rechazo a este acto de violencia y solidarizándose con las familias afectadas.
"La gobernadora Elvia Milena Sanjuan lamenta profundamente esta tragedia y expresa su respaldo al pueblo de Aguachica en estos momentos difíciles. Se ha dispuesto una recompensa de hasta 25 millones de pesos para quien aporte información que permita esclarecer este hecho y llevar a los responsables ante la justicia", expresó el comunicado oficial.
La Comunidad de Aguachica, entre el Dolor y la Indignación
Este ataque, ocurrido a plena luz del día y frente a testigos, ha generado un fuerte impacto en Aguachica. La comunidad ha solicitado mayor presencia policial y medidas de seguridad, especialmente ante el preocupante aumento de la violencia en la región.
De acuerdo con Indepaz, esta es la masacre número 76 registrada en Colombia en 2024, y la tercera ocurrida en el departamento del Cesar en el transcurso del año. Líderes locales y residentes piden acciones contundentes para prevenir nuevos actos de violencia que sigan afectando a la población.