Santo Domingo – El sector financiero dominicano se enfrenta a un cambio trascendental con la entrada en vigor, el 22 de noviembre de 2025, del nuevo estándar internacional ISO 20022, que sustituirá los tradicionales mensajes MT utilizados para pagos y transacciones a través de la red SWIFT.
Aunque SWIFT no desaparecerá, la forma en que los bancos del mundo intercambian información será más estricta y detallada, lo que obliga a las entidades locales a adaptar todos sus sistemas internos: captura, validación, control, archivo y generación de reportes, ahora con datos más amplios y estructurados.
Expertos advierten que la transición no se limita a una actualización técnica, sino a una modernización completa de los procesos para evitar pérdidas de información, errores en pagos internacionales o interrupciones en los servicios bancarios.
En este escenario, el Banco Central está llamado a asumir un rol activo como regulador, estableciendo una hoja de ruta nacional, supervisión técnica y pruebas de compatibilidad, con el fin de garantizar que la migración sea segura, coordinada y sin riesgos para la estabilidad financiera del país.
